Después de algunas semanas cursando el posgrado que empecé en octubre en la UOC me he ido acostumbrando a su modus operandis. La primera asignatura Introducción a la Interacción Persona-Ordenador ha tenido una duración aproximada de un mes y a través de los materiales proporcionados por la universidad y el libro Psicología de los objetos cotidianos hemos presentado cuatro trabajos de evaluación continua.
Antes de nada recomendar encarecidamente la lectura del libro de Donald Norman uno de los pioneros de la Interacción persona-ordenador y el diseño centrado en el usuario que además tiene un background en psicología, algo que lo hace doblemente interesante para mi. (Próximamente publicaré un artículo sobre este libro)
A partir de las bases descritas por Norman en su libro y los apuntes de la asignatura fuimos pasando por diferentes ejercicios semanales desde el análisis de un fragmento de un episodio de los Simpsons, pasando por un corto de Pixar, para terminar con un proyecto final en el que teníamos que presentar dos prototipos de un producto.
A parte de ciertos conocimientos generales sobre la materia y los roles profesionales alrededor de ésta, he aprendido dos cosas muy importantes en la asignatura: 1) para dedicarme a este sector probablemente necesite una base en diseño que no tengo 2) después de unos años en dique seco no es fácil ponerse las pilas y volver a estudiar
En cuanto al punto 1, está claro que un profesional no puede llevar a cabo todas las fases de un proyecto pero cuanto más sea capaz de hacer pues mucho mejor, así que ya que me he dado cuenta de que no tengo ni idea de diseño... ¿que mejor que reaccionar a ello empezando a leer sobre el tema?
Por otro lado el punto 2 en relación a mi motivación académica, no veo otra solución que esforzarme al máximo y aprovechar la experiencia al límite.
Mi objetivo ahora es leer más, escribir más y apreder todo lo que pueda.
La asignatura ha terminado, y tal como nos prometieron, hemos sido introducidos al sujeto de estudio.
Yo por mi parte no me resisto a presentar mi pequeña crítica: creo que podríamos haber contado con algo más de feedback por parte del profesorado. A veces las respuestas tardaban demasiado en llegar o la presencia online del profesorado no era la deseada. Al ser la primera asignatura era fácil sentirse perdido en la metodología o sentirse un poco abandonados a nuestra suerte. Creo que en cualquier espacio de aprendizaje a distancia estos son errores básicos a evitar, sobretodo para asegurar una buena absorción de conocimientos y ayudar a motivar al alumnado.
